La felicidad reside en nuestro cerebro
Ana Sierra
Psicóloga, Sexóloga y formadora
Hoy en día ser feliz es una meta, pero, como dice Ana Sierra, psicóloga y sexóloga, realmente existen momentos de felicidad que nos sirven para sentirnos satisfechos y poder disfrutar de esos momentos. Lo que tenemos que buscar es aprovechar esos instantes. Esto, más allá de mantras y filosofías, consigue que el rendimiento sea mucho mayor, por lo que los objetivos se alcanzarán antes.
Distintas felicidades
Tanto para las personas como para las empresas no existe una única felicidad, cada uno debe encontrar la suya propia. No se puede encontrar la felicidad intentando copiar la felicidad de otros. En las empresas, esta felicidad colectiva depende del estado en el que se encuentre, pero también del estado de ánimo de cada uno de los trabajadores. Por lo que los primeros que deben fomentar ese estado de ánimo son los directivos.
La felicidad es cuestión de química
Somos felices gracias a hormonas que segrega nuestro cuerpo. La dopamina, la serotonina, las endorfinas y la oxitocina son los neurotransmisores encargados de distintos ámbitos relacionados con la felicidad. Y no es tan difícil accionar estas hormonas, podemos engañar al cerebro. “Gracias a la neurofelicidad podemos activarlas. Con una sonrisa, aunque sea falsa, estamos enviando un mensaje a nuestro cerebro y le estamos diciendo que somos felices, aunque realmente no lo seamos en ese momento”, señala Sierra.
Conocer nuestros cerebros
Existen muchos cerebros dentro de nosotros y cada uno rige ciertas funciones. No solo hay un cerebro racional. Es necesario ser consciente de ellos para ser felices, desde el más visceral y primitivo al más emocional. El conocimiento de uno mismo es primordial para poder conseguir esa felicidad. “Es muy interesante que todas las personas sean conscientes de que el poder lo tenemos nosotros en nuestra mano y nuestros cerebros” comenta la psicóloga.
Así que, ya sabes, ¡ser feliz sólo depende de uno mismo!