Cómo gestionar el talento digitalmente
Nerea Burgoa
Directora de Recursos Humanos | ULMA Forja
“No nos han enseñado a ser líderes del departamento de recursos humanos en el entorno digital, por lo tanto se pone en valor el autoaprendizaje y la proactividad”, explica Nerea Burgoa, directora de Recursos Humanos en ULMA Forja, en el siguiente vídeo.
La superidigitalización a la que nos hemos visto abocados de golpe es un gran reto para muchas empresas y departamentos de recursos humanos que no están preparados para afrontarla. Por eso, una de las principales labores que el directivo tiene que realizar es la búsqueda de aliados, tanto fuera, como dentro de la empresa. Es importante no trazar este camino en solitario porque es ahora cuando más dificultades podemos encontrar y más unidos tenemos que estar ante la adversidad.
Autoaprendizaje y proactividad
Las cualidades para gestionar talento digitalmente se basan en la capacidad de autoaprendizaje que ahora podemos desarrollar gracias a la multitud de webinar, cursos online y canales digitales que nos ofrece la formación bajo demanda. Por otro lado, la proactividad entendida como la toma de iniciativa por parte del individuo en el desarrollo de acciones vinculadas con esa gestión del talento. Además de desarrollar las actitudes mencionadas, no se debe olvidar que existen diferentes herramientas a disposición de los empleados y los managers y que se centran en facilitarnos la conexión y la realización de las tareas en línea. Estas herramientas 4.0, tal y como explica Burgoa en el vídeo, nos servirán para aplicar esa capa de tecnología que la empresa y el empleado necesita. Además, romperá con la brecha digital que, en muchos casos, son un freno y se producen por diferentes motivos: falta de medios o conocimientos, diferencias generacionales, escasez de personal o tiempo formativo etc.
El líder en el entorno digital
Los líderes del presente que hayan abrazado la nueva realidad sumándose al hashtag #Yoliderodesdecasa, los que hoy empiezan a modificar su forma de trabajar desde las bases de su cultura empresarial y no solo aplicando el barniz tecnológico obligatorio, mañana serán los que auténticos supervivientes.